¿Recuerdas tus mejores momentos de relax? ¿Verdad que una mahou solía estar siempre presente?
ALGUNAS COSTUMBRES QUE SE CONVIERTEN EN TRADICIÓN
Estoy sentado frente al televisor viendo como se preparan las aficiones del atlético y el madrid en Lisboa, de cara a la final de la Champions. Esto me ha hecho reflexionar acerca de las cosas que con el pasar de los años se convierten en un símbolo de nuestra sociedad, en un clásico y hasta en una tradición.
Digo esto para enlazar con unos anuncios que últimamente me están causando una grata impresión porque es cierto que hay cosas que con el pasar de los años nos unen. Una de esas cosas es la cerveza de estos anuncios, los de Mahou. Y es así porque me siento absolutamente reflejado en el hábil slogan que la marca ha sabido promocionar, pues ¿Quien de mi generación no se siente de Mahou?
TODOS SOMOS MAHOUISTAS
Es lógico que al ver en televisión a personajes tan entrañables e insignes de más de una generación de españolitos asumiendo su condición de mahouistas uno se sienta reconfortado y deje escapar una sonrisa al atardecer. Es gente muy especial la de Mahou, la que bebe mahou, es gente bohemia, es gente normal y es gente famosa con la que es fácil identificarse.
Ellos y ellas, futbolistas, actores y actrices, artistas, cantantes, cocineros, nos cuentan en esta simpática campaña sus historias, en las que una o varias mahou andaban por ahí cerca, haciendo más grato el momento, y también el recuerdo del momento, después de algunos o muchos años.
LOS MOMENTOS DE RELAX QUE MÁS RECUERDO
Mi historia particular, o mejor dicho, mi recuerdo particular de momentos de relax, son las «gordas» o «botellines» de Mahou que de joven tomábamos en sitios como La Parrala, la tasca Botes o el chiringuito de «El Tranche». Los de Cuenca saben de que hablo. Por supuesto que no iban a ser solo los Loquillo, Danis Rovira, Isco, Casillas o Cristina Rosenvigne (de Alex y Cristina) quienes tuvieran recuerdos mahou. ¡No faltaría más!
