Villa Palagonia
En Bagheria, famosa asimismo como la Villa de los Monstruos, muy próxima a Palermo, es uno de los monumentos sicilianos más visitados. Sus excéntricas figuras pétreas recuerdan a aquellas de Bomarzo en el Lazio. Es conocida la atracción que siempre ha generado desde el momento en que los viajantes ilustrados del XVIII y XIX lo denominaran «el sitio más original que existe en el planeta». Indudablemente esta aseveración es algo exagerada, mas podemos asegurar que Villa Palagonia no nos va a dejar indiferentes.
La edificación se levantó en mil setecientos quince bajo los auspicios de Don Ferdinando Gravina y Crujllas, V principe di Palagonia, par del reino y caballero de la orden del Toisón de Oro, una distinción muy reputada de la que solo ciertos nobles podían ser parte.
La obra la ejecutó el monje dominicano Tommaso Maria Napoli, ingeniero militar, con la ayuda de uno de los arquitectos más insignes de Sicilia, Agatino Daidone.
La iglesia de Villa Palagonia
Aparte del palacio, la visita nos conduce a la iglesia que se encuentra en el exterior, obra del arquitecto técnico Tommaso Maria Napoli, y donde la peculiaridad del príncipe asimismo dejó la huella con una escultura que a los piés del Cristo crucificado semeja que suplica o bien reza buscando la redención.
Por consiguiente, se piensa que la villa de mediados de mil setecientos revela una inclinación por la alquimia, y se afirma que su estructura arquitectónica se puede interpretar a la luz de los símbolos esotéricos habituales vinculados a la eterna busqueda de la piedra filosofal, prácticamente en la necromancia.
Alén de estos árboles, puedes descubrir monstruos, duendes, diablos y otras figuras que habitan en las paredes circundantes. Conforme a ciertas leyendas locales, el príncipe tenía estas esculturas inventadas para caricaturizar a sus muchos conocidos que asistían con regularidad a sus fiestas o bien por el hecho de que deseaba abochornar a su esposa supuestamente infiel haciendo caricaturas de sus amantes. Cualquiera que sea la razón, estas figuras especiales y los elementos desarmonizados en la villa han atraído a múltiples escritores y artistas a este sitio encantado, incluidos Henry Swinburne y Johan Wolfgang von Goethe.
Acá hay un extracto de la cuenta de Goethe en su «Viaje italiano»
«Todo nuestro día ha sido ocupado con la insensatez del Príncipe de Palagonia. Sus insensateces resultaron ser bastante diferentes de todo cuanto había imaginado tras oír y leer sobre ellas ….
Otras salas para visitar en la villa incluyen la pequeña capilla, la sala de billar y un vestíbulo decorado con frescos que retratan los trabajos de Hércules. Villa Palagonia es de las mejores opciones para un viaje de un día desde Palermo, destinada a ser una excursión recordable. Un lugar en donde puedes seleccionar entre una pluralidad de especialidades sicilianas, puedes disfrutar singularmente del postre, por ejemplo Marsala de plátano y fresa. Si tienes tiempo extra, puedes visitar otras villas, como Valguarnera y Villa Cattolica, que cobija un museo dedicado al pintor siciliano Renato Guttuso.
