Razones vintage para empezar a jugar con maquinas recreativas nuevas – Desearás haber empezado a jugar con maquinas recreativas nuevas antes…
Novedades en máquinas recreativas Jomesa
Están en la vanguardia del ámbito de las máquinas recreativas con las novedades que más se amoldan al perfil de los bares. Las máquinas recreativas más modernas son precisamente las vintage y una de las razones por las cuales han resistido la prueba del tiempo es por el hecho de que todavía dan un alto grado de emoción y recuerdos para toda la familia.
Los juegos tradicionales de arcade como Pac-Man, Super Mario Brothers, Donkey Kong, Galactic Proteger y otros géneros de juegos son aún muy entretenidos. Los adultos siempre y en todo momento pueden regresar a visitar sus recuerdos de la niñez, jugando a diferentes géneros de juegos de arcade, como el Street fighter o bien el Pacman. De este modo, probablemente, las máquinas de juegos de arcade continuarán en la industria a lo largo de múltiples años más, pese a la presencia de consolas de juegos más avanzadas en el mercado. Además, Jomesa nos da la opción de alquiler máquinas recreativas.
Si, las ha mantenido vivas la moda vintage. En muchos bares, tiendas, ferias, podemos localizar decoración de lo más vintage y cool, como las máquinas recreativas, que siempre y en todo momento dan mucho valor y un toque muy singular al local.
Hay un nuevo término de negocios que se prolonga por todo el planeta y lógicamente, España no se queda atrás. Se trata de la incorporación de máquinas de arcade en los circuitos dedicados a la hostelería y el ocio adulto. La incorporación de esta clase de máquinas en los establecimientos de hostelería se genera como una forma de procurar distinguirse de la enorme competencia que existe en el ámbito, atrayendo un público un tanto diferente, que le agrada la diversión y el azar, mas no de la clase ofrecida por las salas de casino.
Bar arcade
Esto transforma a las máquinas recreativas de clase A en un entretenimiento exento de los inconvenientes asociados con el manejo de premios en efectivo y tampoco promociona las apuestas. Generalmente, el establecimiento que desee agregar estos arcades a su entretenimiento, solo debe de ponerse en contacto con una fabricadora especializada y efectuar la adquisición o bien alquiler, eligiendo entre un extenso catálogo de máquinas novedosas y tradicionales.
Al no haber compensación económica por la inversión en tiempo de juego que se efectúa en una máquina recreativa, el establecimiento precisa crear incentivos, singularmente los que generan en ciertas personas los juegos para videoconsolas, la añoranza por las máquinas arcade vintage y el placer que generan cuando se gozan en buena compañía de amigos mientras que se toman unas copas.
Muchos y muchas tuvimos la enorme fortuna de gozar de aquella temporada mágica en la que las máquinas recreativas, las monedas de 5 duros y los ordenadores de ocho bits eran el centro de nuestro cosmos del entretenimiento. El coleccionismo y la afición a la electrónica han hecho que muchas de aquellas máquinas hayan sido restauradas y prosigan siendo usadas por sus dueños. Algunos han creado un nuevo concepto que mezcla los bares tradicionales con los salones de recreativas.
La administración de esos locales no es fácil, sobre todo por el hecho de que esas máquinas acostumbran a precisar un mantenimiento singularmente exigente y frágil. Muchos componentes no se fabrican ya, y ciertos dueños asisten a mejoras “modernas” como joysticks y pantallas llanas que son comunes hoy día mas que eran impensables en aquella temporada.
Para los puristas lo idóneo es contar con las máquinas originales, que es posible localizar de distintas formas. Pero su elevado coste y que requieren un mantenimiento, por el hecho de que ciertos de sus componentes tienen data de caducidad, las hacen difíciles de mantener.
El Computerspiele Museum de Berlín no es muy grande y se recorre en una mañana reposadamente, mas tiene ciertas exposiciones temporales temáticas y una buena selección de ordenadores, consolas y máquinas recreativas. A nivel técnico hay múltiples universidades y museos de ciencias que disponen de ciertas máquinas más relacionadas con el principio de la informática que con el segmento de los juegos en sí.
En este sentido, hay gente que se dedica a repescar viejas máquinas recreativas de acá y de allí. Los apasionados a la retroinformática acostumbran a dar esos primeros pasos con el empleo de emuladores software usuales, mas lo normal es que esa afición se entremezcle con el coleccionismo. Si deseáis hallar equipos y máquinas viejas, hay de nuevo distintas opciones alternativas a las que asistir.
Hace 5 años que se fabrican y personalizan máquinas arcade como las de los ochenta y noventa. El coste medio de una máquina estándar es de mil euros. Pero en lugar de un solo juego por máquina, ahora caben los que desees. Si eres un purista, buscas las máquinas con trasero, como el de los televisores de antes.